Nuevo movimiento en el impreciso tablero de ajedrez que plantea la situación actual de Airbus. El calendario de acciones continúa en una lucha constante por mantener la planta y los puestos de trabajo en Puerto Real. Los trabajadores y trabajadoras de la factoría se concentraron sete jueves en el muelle del Bajo de la Cabezuela, en un intento más de demostración de que la localización es inmejorable y estratégica para el desarrollo de la actividad de la multinacional.
Los operarios del turno de la mañana pararon su actividad a las 12:30 horas, en el paro de dos horas programado en el calendario de movilizaciones aprobado por el comité de empresa, y se dirigieron hacia los muelles donde se hacían las entregas de grandes componentes. En el turno de tarde también se llevó a cabo su correspondiente paro de dos horas con una concentración a las puertas de la fábrica.
“Esta concentración pone de nuevo en relieve parte de las instalaciones que hemos estado utilizando desde la Bahía de Cádiz para el envío de componentes aeronáuticos hacia el mundo entero”, exponía ante los medios Juan Manuel Trujillo, presidente del Comité de Empresa de Airbus Puerto Real. A sus espaldas quedaba el almacén donde se guardaban los componentes aeronáuticos del A380, el superjumbo que la empresa ha dejado de fabricar, antes de ser embarcados.
Trujillo destacó que esta característica, la conexión marítima, “fue la razón de origen de la planta de Puerto Real en el año 1988”. “Es por ello que se hace necesaria la conexión entre la industria aeroespacial en este país y el resto del mundo a través del envío de componentes por la vía marítima. Es fundamental y tan estratégico como cualquier otro aspecto”.
Quisieron poner sobre la mesa este aliciente “para que se tenga en cuenta a la hora de tomar las decisiones que correspondan en Airbus Puerto Real”. Para ello, el catedrático de la Universidad de Cádiz Alberto Ramos compartió con los asistentes una reseña de la historia de los puertos en Cádiz y su vinculación con la producción y el mercado.
En cuanto a los cuatro trabajadores con diligencias policiales abiertas por la defensa de los puestos de trabajo, Trujillo apuntaba que “hemos puesto sobremanera blanco sobre negro en el comunicado del Comité Interempresas, que representa en su conjunto algo más de 12.000 trabajadores y a los cinco sindicatos; novamos a sostener ningún tipo de presión de esas características ante una circunstancia como la que estamos pasando. Por lo tanto, máxima cohesión y respaldo hacia los trabajadores, que lo único que hicieron fue defender, como todos, el futuro y el devenir no solo de Airbus sino del tejido industrial que tenemos alrededor de las plantas matrices de Airbus en este país”.
Preguntado sobre en qué punto se encuentran las comunicaciones con la dirección de la empresa, el presidente del comité señalaba que están “en punto muerto” dado que “no hay avance en las discusiones”.
Es por ello por lo que siguen insistiendo ante esa circunstancia de incertidumbre y por lo que han anunciado una huelga general a partir del próximo viernes 21 en todos los centros de trabajo de Airbus y con proyección de posible continuidad de esa huelga de forma indefinida a partir del lunes 24 de mayo “si es que la dirección de la compañía en este país no se atiene a ponernos encima de la mesa una propuesta que nos permita entender que el empleo se mantiene y que las plantas se mantienen”.
“Mientras que eso no sea un hecho constatable estamos firmemente convencidos de que habrá que continuar con la pelea de la manera más inteligente, como es con el concurso de todos y cada uno de los trabajadores de las ocho plantas del grupo Airbus en España”, concluía Trujillo.