La jueza de Instrucción número 10 de Sevilla ha acordado este martes, a petición de la Fiscalía, la puesta en libertad provisional del dueño de Magrudis, José Antonio Marín Ponce, y su hijo, ambos en prisión desde el pasado 26 de septiembre por el brote de listeriosis detectado en verano.
En un auto dictado este 17 de marzo, la instructora acuerda la puesta en libertad provisional de ambos investigados, para lo cual libra mandamiento al director de la cárcel de Sevilla-I, y les impone la prohibición de salir del territorio nacional, por lo que deberán entregar sus pasaportes en la comisaría más cercana a sus domicilios.
Además, una vez cese el estado de alarma deberán realizar comparecencia ante el juzgado todos los lunes de cada mes, según ha informado a Efe la oficina de comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
La magistrada considera que las circunstancias que concurrían en el momento de dictar la medida cautelar de prisión provisional "han cambiado sustancialmente" a día de hoy, pues en primer lugar la investigación "se encuentra prácticamente terminada, a la espera únicamente de informes periciales ampliatorios, informes médicos y ofrecimiento de acciones a los perjudicados".
Por ello, considera que "el riesgo de que puedan ocultar, alterar o destruir fuentes de prueba relevantes es prácticamente inexistente".
La magistrada también argumenta que el riesgo de fuga ha disminuido, "dadas las circunstancias que concurren" y también una vez decretado "el estado de alarma y limitada por tanto la libertad de circulación de las personas, que únicamente podrán circular por las vías de uso público para la realización de las actividades" indicadas el artículo 7 del Real Decreto aprobado por el Gobierno.
De este modo, la jueza acuerda la puesta en libertad provisional de los dos encausados sin prestación de fianza, ya que el Juzgado "ha realizado previamente la oportuna investigación de bienes y carecen de medios para hacer frente a cualquier fianza que se le impusiera en estos momentos".
Los encausados, que saldrán de prisión a lo largo de este martes, están siendo investigados por un delito contra la salud pública en su modalidad de fraude alimentario, tres delitos de homicidio por imprudencia, dos delitos de lesiones a feto con resultado de muerte y varios delitos de lesiones imprudentes.
