La firma trianera Carmen Acedo inauguraba la segunda jornada de ‘Holea y Olé’ con su colección ‘Callejuela de la O’ y sus propuestas llena de los colores míticos de sus creaciones. Negro, verde botella, grises y burdeos daban paso a los lunares y las flores en un desfile donde los canasteros y el estilo patchwork se adornan con aplicaciones y encajes. El lino, el chantilly y el encaje de bolillos ayudan a realzar, mejor que nunca, la belleza de la mujer flamenca según Acedo.
Pepa Garrido regresaba “más viva que nunca”, como apuntaba Carmen Cañaveral, directora creativa de la firma, con su colección ‘Viva la Pepa’. Sus propuestas para 2020 están llenas de personalidad y se basa en unos trajes confeccionados con tejidos ligeros y plisados como creps y gasas.
Por su parte, José Manuel Valencia aterrizaba en Holea con su colección ‘Muy yo’ compuesta por varias líneas claramente diferenciadas. Una guiada por el color blanco, otra con una amplia gama de colores pasteles y otra con el negro como claro protagonista. Destacan en las propuestas de este diseñador de Rociana las grandes mangas, los encajes y aplicaciones y en contraste entre trajes estrechos con otros más cómodos y con soltura.
La diseñadora Rocío Márquez presentó un desfile lleno de alegría, fuerza y mucho color con su colección ‘Aquarela’ con trajes de piel de ángel, crespones y tejidos con licra. Sus flamencas lucen talles altos, mangas XXL, volumen y tantos lunares como vestidos lisos y otros estampados.
Paco Prieto presentaba ‘Silencio’, una colección intimista con un trabajo novedoso en la mezcla cromática y en las texturas pero que no abandona la base de patrones clásicos de la firma onubense. En la soledad creativa de su taller, “está colección ha surgido como sentido homenaje a esas costureras anónimas que con su buen hacer preservaron en épocas de carencia la belleza única del traje de flamenca de Andalucía”, comentaba el propio diseñador.
Flamenca Pol Núñez, coincidiendo con su 25 aniversario en el mundo la moda, presentaba una colección recopilatoria de varias etapas. Así, bajo el nombre ‘Solo son 25’ propusieron lunares, flores o mantones de punto de cruz. Mucho color y mucha alegría para un desfile donde los trajes volvieron a ser eclécticos, llenos de tonos vivos y con cortes asimétricos.
Fiel a su cita, la emblemática casa de bordados Foronda también refrendó su apuesta por el clásico mantón de manila, una prenda tradicional de nuestra tierra que, además de estar muy arraigada y dar elegancia al flamenco, ha sabido adaptarse a los tiempos para ser un complemento de moda y actualidad en el estilismo femenino para los eventos más cotidianos.
Y cerrando la jornada, el ‘El Ajolí’ presentaba ‘Rincones del alma’. Un verdadero ejercicio de introspección el que hacía la firma de Pepe Jiménez con una colección que derrochó mucho color sobre la pasarela, con predominancia de tonos pasteles, sobresaliendo el lavanda y el lima. En las texturas, tejidos de gasa vaporosos, tules bordados, estampados florales muy dulces y lunares diseño propio de la casa. La firma onubense apuesta además en 2020 por la comodidad de los talles altos “porque queremos que las mujeres bailen y disfruten libres, sin ataduras”, como indicaba Pepe Jiménez. En cuanto a complementos, ‘El Ajolí’ofrecía especial protagonismo a la piel en distintos tonos y con remaches en algunos casos.