Un mes. Es el plazo que la Audiencia Nacional ha dado a Fertiberia S.A. para presentar el aval de 65,9 millones de euros exigido para asegurar la correcta ejecución de los trabajos de regeneración mediombiental de las balsas de fosfoyesos.
El requerimiento, que debe realizarse “con carácter inmediato, según se recoge en el auto dictado por la Audiencia Nacional el pasado 30 de octubre, se produce en respuesta al incidente de ejecución de sentencia promovido por Feriberia en enero de 2017 por el que la compañía solicitaba que el aval se redujese a 21,9 millones de euros. Un incidente que fue alegado por el Ayuntamiento de Huelva, WWF y la Asociación Mesa de la Ría.
Ahora la Audiencia Nacional se pronuncia sobre los requerimientos de la compañía asegurando que “procede la íntegra desestimación de las pretensiones ejercitadas por Fertiberia” y que la fianza ha de ser “sin paliativos ni demoras, la de 65,9 millones de euros”.
Entre las razones para pedir la reducción del aval Fertiberia alegaba su “delicada situación económica”. Sin embargo, la Audiencia Nacional considera que depositar un aval de esa cantidad “no parece incompatible con los resultados y demás datos económicos de Fertiberia y con su tendencia a la recuperación iniciada en año 2017”, según demuestran las cuentas de la compañía.
Además, la Audiencia Nacional tiene en cuenta los razonamientos de la Asociación Mesa de la Ría al considerar que las instalaciones de Puertollano no podían usarse como aval tal y como pretendía Fertiberia.
En este sentido, la Audiencia considera “notoria” la “inadecuación e insuficiencia” de la fábrica de Puertollano como aval hipotecario.
Tras conocerse el auto, el portavoz de Mesa de la Ría, Rafael Gavilán, ha recordado que el “único proyecto admisible es el que contemple la restauración integral de la marisma y la devolución a su estado natural”.
Asimismo, ante la anunciada venta de Fertiberia al fondo de inversiones Triton, Mesa de la Ría ha anunciado que estudiará “la posibilidad de derivar la responsabilidad sobre la restauración de la marisma al grupo matriz OHL, para evitar que con esta operación pueda eludir la obligación impuesta por la Audiencia Nacional”.
Por su parte, desde WWF Juanjo Carmona ha asegurado que el colectivo ha encajado el auto con “satisfacción” porque supone que el proyecto de restauración esté “realmente respaldado por unas fianzas reales y no por unas entelequias como podrían ser unas fábricas o un posible negocio”. Es importante, recalca, “que los ciudadanos tengan la seguridad de que si Fertiberia no cumple las garantías van a ser ejecutables”.
