La defensa del presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha pedido este lunes la recusación del magistrado instructor, Carlos Ramos, que le procesó por desobediencia por no retirar las pancartas y los lazos de la Generalitat, durante las elecciones generales y pese a que se lo había solicitado la Junta Electoral Central (JEC).
Según el escrito del letrado al que ha tenido acceso Europa Press, el juez podría haber incurrido en una falta de imparcialidad en las afirmaciones contenidas en el auto de acusación del 27 de junio de 2019 tales como que Torra "pretendió (...) persistir en la desobediencia".
"Se trata de frases, razonamientos y manifestaciones rotundas y de evidente culpabilidad que reflejan, en toda su intensidad, la posición ya asumida por parte del instructor", que el letrado considera que están atentando contra el derecho a la presunción de inocencia de Torra, tal y como expone el texto.
"Dicho de manera muy clara, no habiéndose dictado aún sentencia condenatoria, dichas manifestaciones le atribuyen un responsabilidad que, entendemos, aún está por determinarse... ¿o no?", plantea el abogado del presidente.
También asegura que el magistrado ha "infringido el principio de legalidad", algo que argumenta cuando el juez considera a la JEC autoridad superior a la Generalitat.
Así, según el documento, el juez considera que Torra es "un subordinado de la JEC" y, por tanto, debió de haber obedecido sus órdenes, y el letrado recuerda que el Parlament había rechazado dos proposiciones de ley que instaban a la prohibición de exhibición de lazos amarillos en espacios públicos e institucionales.
"No duda el Magistrado Instructor en retorcer el derecho a fin de que los hechos investigados encajen en el tipo penal" del delito de desobediencia, explica el letrado.
Este escrito se presenta después de que la defensa solicitara la abstención de Carlos Ramos y entendiendo que se ha rechazado dicha abstención.
