Sauternes, la reconocida región vinícola de Burdeos y uno de los más afamados ejemplos de los vinos que integran con merecimiento el Salón Internacional de los Vinos Nobles, protagonizó ayer en la Mezquita la cata inaugural del amplio programa de Vinoble 2018.
Decenas de aficionados y profesionales del sector se dieron cita -ha sido una de las catas que antes cerraron el cupo de reservas- para asistir a la excelente selección de hasta nueve tipologías de Grand Crus Classés de Sauternes para la cata que impartió Francois Passaga, importador en España de FAP Gran Cru. Sus explicaciones sobre cómo y dónde surgieron estos vinos, sus características definitorias y los detalles que le hacen diferentes a muchos otros trataron de fundamentar la razón por la que se sitúan entre los más grandes, raros y caros del mundo.
Un hongo, la clave
Sólo una de estas interrogantes tiene una explicación objetiva: su rareza. La acción de un hongo, Botrytis Cinerea, está en la base de su producción. La podredumbre que provoca en las uvas, que perjudica su rendimiento en más de un 80%, fue aprovechada hace siglos en esta pequeña región francesa -como en otras zonas contadas del mundo- para la obtención de los excepcionales vinos de Sauternes.
Y es que el clima de la zona de Burdeos se caracteriza por la influencia marítima atlántica, con otoños con mañanas frías y húmedas y tardes cálidas y secas, que propicia el ambiente perfecto para el desarrollo del hongo en los viñedos. Sus propiedades hacen que concentre los aromas y los azúcares de la uva, manteniendo la acidez necesaria para equilibrar el vino.
Las uvas se seleccionan a mano, muchas veces una a una, en diferentes pasadas por el viñedo para sólo seleccionar aquellas que han sido afectadas adecuadamente por el Botrytis.
Otro ejemplo que sigue este procedimiento a la hora de elaborar el vino lo tenemos presente un año más en Vinoble con los ya populares Vinos de Tokaji procedentes de Hungría.
Elaborados con una uva tardía y deshidratada, denominada aszú, sujeta a la acción del hongo da lugar a unos excelentes vino dulces, finos y concentrados.
