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Provincia de Cádiz

“Las mejoras para Algeciras y La Línea se quedaron en el papel”

El SUP reclama al ministro del Interior mas realidades para poder hacer frente a las bandas organizadas de narcotraficantes en la provincia

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El ministro Juan Ignacio Zoido ha estado esta semana en La Línea. No ha habido anuncio de efectivos concretos, aunque es una prioridad, ni de mejora de medios, ¿con qué sensación os quedáis?

—Agradecemos la visita, pero es una más. Es la séptima vez que viene. Ha dicho que va a haber refuerzos, pero queríamos oír medidas concretas que ya le hemos hecho llegar a través del delegado del Gobierno y al director de la Policía. Mientras esos refuerzos llegan a La Línea, se debería tomar ya cartas en el asunto

¿Han tenido la oportunidad de trasladarle al ministro su preocupación?

—No hemos tenido ocasión, ni los sindicatos policiales ni la asociación de la Guardia Civil, aunque él conoce de sobra lo que le íbamos a explicar.

Para los que no viven en el Campo de Gibraltar, ¿usted cómo definiría lo que está ocurriendo allí?

—Llevan muchos años sin prestarle la atención adecuada ni al Campo de Gibraltar, ni a Cádiz, y de forma particular a La Línea. Y esa falta de atención se puede verificar con las tasas de paro que tenemos, y porque ese vacío que genera la falta de atención lo han ocupado bandas criminales, narcotraficantes que campan a sus anchas, y hay que implementar medidas, no solo policiales, para que se recupere la tranquilidad social y se lleve una vida normal

Se habla de excepcionalidad tras lo ocurrido en las últimas semanas, ¿está de acuerdo?

—No, ya son muchos casos aislados, no es una excepcionalidad cuando se acosa a una juez, cuando sea agrede a nuestros compañeros, cuando te lanzan piedras cuando vas a intervenir, que te abren la cabeza de un ladrillazo, que muere un policía local en un alijo de tabaco, cuando hay un asalto a un hospital y se llevan a un detenido…

El ministro ha dado un dato: el 40% de la droga incautada en 2017 en toda España procede de la provincia de Cádiz.

—Nos tendríamos que ir un poco más lejos. No basta con detenerse en lo que se incauta, sino que hay que  tener en cuenta lo que no hemos sido capaces de incautar debido a la falta de medios humanos y técnicos.

El PSOE dice que desde 2011 hay una pérdida de 150 efectivos en la zona. ¿Esto es así y cómo afecta a la labor policial?

—Afecta en que tenemos catálogos de puestos de trabajo obsoletos, de los años 90, y todo ha cambiado, incluso la actividad delincuencial. Nos tenemos que adaptar a esa situación. Además, hablamos de puestos de trabajo obsoletos y que encima no están cubiertos. En el Campo de Gibraltar faltan ahora mismo unos 300 policías para completar ese catálogo de puestos y que es lo que estamos reclamando. Luego, hay que tener en cuenta que ya en el 98 las comisarías de Algeciras y de La Línea se catalogaron de primera categoría, pero se ha quedado en el papel, no se ha adoptado ninguna medida más. En Algeciras puede que algo más, porque tienen unas instalaciones nuevas y hay más plantilla, pero la mayor parte se ha quedado en el papel.

¿Qué supondría llevar esa catalogación a efecto?

—Que se formaran grupos especializados en blanqueo de capitales, que es muy importante por el narcotráfico, ya que lo principal para ellos es el dinero. Si se investiga el blanqueo de capitales se detectarán más bandas. En definitiva, grupos especializados, con medios adecuados para esa lucha. Más personal, más instalaciones y vehículos nuevos, y adaptados a la zona.

El Secretario de Estado de Seguridad, por su parte, ha dicho recientemente que sí hay más efectivos.

—El año pasado hubo un refuerzo eventual, pero se fueron con el tema de Cataluña y no han vuelto. Se instaló una normalidad ficticia que es muy peligrosa. Hay dos vehículos zetas y días que solo hay uno. El refuerzo puntual nos viene bien, pero mientras se organizan y prevén otro tipo de medidas.

¿A qué tipo de delincuentes os estáis enfrentando?

—A delincuentes muy peligrosos. Con medios mejores que los nuestros, por desgracia, y les da lo mismo hacer una cosa que otra. No tienen ningún respeto a las medidas judiciales, a las fuerzas y cuerpos de seguridad, les da lo mismo. Tuvimos hace poco una intervención en la que descubrimos un narco-radar que controlaba a todos los vehículos policiales, tanto por mar como por tierra. Cuentan con unos medios que las fuerzas de seguridad no tenemos.

¿Desde cuándo están tan profesionalizados y con tecnología tan puntera?

—Creo que como se está produciendo un relevo generacional entre esas bandas, por edad o porque están en prisión, y van dando paso a sus hijos o a sus sobrinos, y la juventud no teme el enfrentamiento, y ahí es donde está la cuestión. Los narcotraficantes antiguos no sobrepasaban la línea del enfrentamiento directo, y los más jóvenes sí.

¿Tenéis cálculo de cuántas bandas hay asentadas?

—Son datos a los que no tenemos acceso, pero sí es cierto de que debe haber un montón de bandas y que se mueven, son itinerantes, cambian de lugar, de táctica…

¿Hasta qué punto son jóvenes que no encuentran otra salida que la de meterse ahí?

—El paro es muy importante y la desatención del Campo de Gibraltar, pero hay que unir la falta de medios policiales, de medidas judiciales, la del propio relevo generacional en las bandas, de que están muy próximos a Marruecos, el productor mundial de hachís, la cercanía de Gibraltar por la política fiscal, lo que hace para ellos de la zona casi un paraíso. Y el remate fueron las dos series de televisión de El Príncipe, Narcos y El Niño, que fue como darle un toque de glamour a una actividad ilícita.

Antonio Sanz ha dicho que no se soluciona solo con más policía, que hace falta una política más integral, ¿lo comparte?

—Sí, totalmente. Es cierto que para implementar medidas de otro tipo hace falta tranquilidad social con medidas de seguridad, pero hacen falta medidas sociales, educativas… Hay que verlo todo de manera multidisciplinar, pero hay que empezar, no vale que venga el ministro y no se haga nada.

¿Qué tipo de armas llevan y con qué medios os enfrentáis a las bandas?

—Los medios que nosotros tenemos son insuficientes, aparte de que necesitamos medios para investigaciones especiales. Lo más básico, que es la reposición de vestuario, no la tenemos. Imagina cosas más costosas. Hacen falta instalaciones como son debidas, hasta vehículos adecuados…

¿Cuál es el ánimo entre los compañeros?

—La verdad es que los compañeros se sienten abandonados. El otro día, cuando asaltaron el hospital, nos mandaban mensajes y nos decían que esto era ya lo último. Van por la calle patrullando y los delincuentes de poca monta hasta casi se burlan de ellos. Están preocupados y decepcionados, pese a que venga el ministro y les den las gracias y palmaditas en la espalda. Hay que tener en cuenta que muchos de ellos ni siquiera viven allí, se desplazan a otras localidades. Esas plantillas son pues de paso, no tienen arraigo. Aquello habría que catalogarlo como una zona de especial singularidad, porque es que lo es. Es que no creemos que haya en España ninguna localidad como La Línea, con lo que pasa allí todos los días.

¿Qué le parece la propuesta del comisionado?

—Si se dota económicamente y la forman personas especializadas en el tema policial, educativo, social… sería interesante, pero si es para los reproches de unos partidos y otros, o para estadística, no es necesario más órganos o burocracia.

¿Cómo se sienten después de detener a alguien y las vean al poco en la calle?

—A los juzgados y al poder judicial le ocurre lo mismo, se ven afectados por la falta de medios, de una normativa adecuada. Se tienen que poner a legislar para que eso no ocurra, porque actúan según legislación. Lo que no es normal es que un coche que ha intentado atropellar a dos compañeros, al conductor le pongan solo una fianza de 3.000 euros, cuando eso es calderilla para los que se dedican al narcotráfico, eso lo gana quien está de vigilante en el paseo marítimo para avisar cuando llega una patrulla policial. La pagan y punto.

¿Esto tiene solución?

—Si se hace lo adecuado sí. No se va a lograr de la noche a la mañana, pero si se ponen las medidas adecuadas y seriedad y se empiezan a tomar medidas urgentes, se podrá revertir. Pero hasta que no haya tranquilidad social, o se cree una Unidad de Prevención y Reacción, creación de juzgados especializados en narcotráficos, normativa de narcolanchas, que hay que regularlo ya. Medidas hay muchas, pero hay que empezar.

Hablamos del Campo de Gibraltar, pero es que tenemos también la desembocadura del Guadalquivir en Sanlúcar que es otro punto caliente de droga… Es una provincia muy singular, pero la falta de policías debe ser una carencia a nivel provincial…

—Sí, es en toda la provincia. En Cádiz tenemos una peculiaridad. Fuimos evacuados de la antigua comisaría y ahora estamos ubicados en el edificio del Pirulí, que cuesta 430.000 euros anuales, y van para tres años ya, cuando se podría haber construido una nueva. Además, el edificio del Pirulí no tiene zona de detención, hay que llevar a los detenidos a San Fernando, con lo que supone eso de derivación de personal. Asimismo, tenemos mucho personal dedicado solo a temas migratorios, a repatriaciones, a recepcionar a los inmigrantes cuando llegan… Sanlúcar es otro punto caliente y está bajo mínimos en personal. En Jerez, la comisaría nueva ha habido que derribarla y están reparando los techos de la antigua.

El PSOE ha denunciado que considera un fraude las 20 plazas de policía nacional anunciadas para Jerez, ¿lo consideran insuficiente?

—Sí, igual que en La Línea, donde solo han salido cinco plazas, cuando se necesitan cien para cubrir un catálogo obsoleto. Desde el SUP presentamos las alegaciones y no nos hacen ni caso. Hay un déficit de policías tremendo, porque no se cubren las plazas de policías jubilados, aparte de que un policía no se hace en dos meses, necesita dos años de formación. En provincias donde haya menos delitos y menos presión migratoria lo llevarán mejor que aquí, pero es que aquí tenemos de todo, tenemos aeropuerto, dos puertos importantísimos, dos CIE, presión migratoria, narcotráfico… Es una provincia con una especial singularidad.

 

*Entrevista realizada en el espacio A Compás de Ondaluz TV

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