El vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, sospechoso de corrupción en la trama Odebrecht, ingresó hoy en una prisión en el norte de Quito, a la que fue trasladado por la Policía tras su arresto la pasada noche en la ciudad costera de Guayaquil.
De 48 años, Glas llegó a la capital en un avión de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, un vuelo de apenas 50 minutos de duración en el que estuvo acompañado por su tío Ricardo Rivera, también sospechoso del mismo delito de asociación ilícita.
Tras aterrizar en el aeropuerto Mariscal Sucre, a unos 20 kilómetros de Quito, el convoy de varios vehículos con cristales oscuros llegó a la Cárcel 4 alrededor de las 23.00 locales (4.00 GMT).
Allí, en la zona de El Condado, le esperaban un grupo de seguidores con banderas del movimiento de izquierdas Alianza País y que corearon consignas en defensa de Glas, mientras la Policía mantenía la zona acordonada para impedir que se aproximaran a la prisión.
El cordón policial y las barreras impidieron ver la entrada del vicepresidente en la prisión.
Glas, que sigue negando cualquier relación con la red de sobornos de la constructora brasileña en el país, se entregó el lunes a la Policía en su residencia, después de que un juez de la Corte Nacional de Justicia le privara la libertad de forma cautelar.
La decisión, tomada en una audiencia celebrada en Quito, fue el resultado de nuevas pruebas presentadas a la corte por la Fiscalía General, que obtuvo recientemente nueva información de Estados Unidos sobre el caso Odebrecht, que de una u otra forma salpica desde hace diez meses a numerosos países latinoamericanos.
Esa nueva información abre la posibilidad a que tanto Glas como su tío Rivera sean acusados de dos nuevos delitos, entre ellos el de cohecho.
Horas antes, la ministra de Justicia, Rosana Alvarado, había confirmado que para albergar al vicepresidente en ese centro de detención de la capital fue necesario trasladar al ex ministro de Hidrocarburos, Carlos Pareja Yannuzzelli, también acusado de corrupción, a otro centro en Latacunga, al sur de Quito.
Yannuzzelli, que formó parte del mismo gobierno del ex presidente Rafael Correa que Glas, se entregó en agosto pasado para rendir cuentas ante la justicia de su país en una docena de expedientes.
La ministra no reveló sin embargo a qué centro de detención iba a ser trasladado el tío del vicepresidente, que sufre problemas de corazón y requiere tratamiento médico.
En las últimas semanas Rivera se encontraba bajo arresto domiciliario, en tanto que Glas tenía prohibida su salida de país.