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Nostalgia de Alfonso Perales en la conmemoración del PSOE de Alcalá

Irene García destaca la enorme aportación de Alcalá al socialismo del que Pérez Rubalcaba reivindica “sus principios y raíces que no debemos olvidar”

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La figura de Alfonso Perales ha marcado la primera jornada del 130 aniversario del PSOE de Alcalá de los Gazules que acoge entre hoy y mañana el convento Santo Domingo El Compás para reivindicar la historia de la primera agrupación rural de España. Presente tanto en las intervenciones del alcalde, Javier Pizarro, y de la secretaria general del PSOE gaditano, Irene García, como en el coloquio posterior del historiador Diego Caro, y especialmente, en el del ex secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien ha confesado que durante su etapa como líder de la organización “lo echó mucho, mucho, mucho de menos”. Tanto que piensa que de haber estado vivo Alfonso, las cosas habrían sido muy diferentes.

“Alcalá es conocido por muchas cosas- dice su alcalde- por nuestro paisano Alejandro Sanz, por el parque natural, por nuestra gastronomía, lo que más me enorgullece es que es conocido por muchos, por los buenos políticos que ha dado esta tierra”. Pizarro ha agradecido “a los militantes su entrega, a los que crearon el partido, a los que perdieron su vida defendiendo nuestras ideas y a los de hoy, gracias a todos ellos, Alcalá cumple 130 años”.

Por su parte, la dirigente socialista ha valorado la oportunidad de estas jornadas para “retomar fuerza desde el conocimiento de nuestra historia que tanto aporta al socialismo”. Junto a las figuras emblemáticas, García propone un reconocimiento también a esa gente anónima que “son el motor de la organización”. En tiempos complicados, arguye García, “sólo se construye a través de los valores de siempre, y para nosotros es una satisfacción y tenemos una gran faena que es seguir construyendo una sociedad mejor, una provincia mejor, pero hace falta un socialismo más fuerte apretando ese sentido”. “Estamos en una provincia complicada donde lo único que nos obsesiona es ser un partido útil, que la gente entienda que somos el mejor instrumento para solucionar los problemas a tantas familias que, a pesar de los cantos de sirena, siguen pasándolo mal”. La también presidenta de la Diputación ha insistido en que “aprovechemos la historia para ser capaces de seguir construyendo ese relato tan magnífico que a todos nos pertenece”.  

En un coloquio a dos bandas, moderado por el periodista Paco Perujo, Diego Caro vino a relatar la historia del socialismo alcalaíno, llena de visicitudes aunque también plena de éxitos. El profesor de la UCA y “militante en la reserva”, como le gusta decir, mencionó al periódico El Socialista como fuente de información para seguir el rastro de una agrupación que aparece y desaparece ante la presión que ejerce el poder monárquico establecido que lo considera “una organización secreta”. Contaba ya por entonces con 20.000 militantes- difícil de sostener esa acusación- y su vinculación al anarquismo de la CNT condenará a muchos de sus miembros a sufrir ya la represión política.
Caro ha explicado las causas por las que tanto le cuesta arrancar al socialismo, “en parte por errores propios del partido y en parte por causas del propio aparato del Estado” y apunta como moraleja que “hay que analizar la realidad social y tomar medidas para adaptarse a ella”. Tras hacer un recorrido por la aportación de los tres primeros ministros socialistas y más tarde, por la de aquellos jóvenes que reorganizaron el partido desde la clandestinidad, el profesor se ha pronunciado respecto de la situación actual del partido. “A este partido nada le ha hecho más daño que la división”. Y puso de ejemplo el momento crítico del Frente Popular “donde el partido se quedó paralizado y si hubiese estado unido, todo habría sido diferente”.

Desde una perspectiva más cercana, Alfredo Pérez Rubalcaba ha reivindicado la importancia de cultivar las raíces de ese roble centenario que es el PSOE y “no olvidar nuestros principios”. Ha querido lanzar un mensaje de confianza en las siglas. “Si no las olvidamos, si hacemos como otras veces, valorándolas y haciendo los replanteamientos ideológicos necesarios, haciendo un gran esfuerzo, si lo hacemos, volveremos a ganar las elecciones y gobernaremos”, ha recalcado.
Pérez Rubalcaba ha descrito al PSOE como “un partido reformista, laicista sin ser anticlerical, internacionalista, antibelicista y pedagogo, que siempre ha estado presente cuando ha habido un logro en derechos sociales, porque si miramos la historia de España, todas las reformas sociales llevan el ADN del PSOE”.

El exsecretario general del PSOE que ha abundado en que “los socialistas siempre creyeron en el valor de las instituciones”, se ha detenido en su discurso en dos asuntos sobre los que ha querido realizar aclaraciones. Uno, la cuestión territorial y el independentismo catalán. A su juicio, la autodeterminación y el derecho a decidir “no es un problema legal ni de la Constitución sino político: “No creemos en él porque fragiliza nuestro país”. “Cuando hicimos la Constitución, que es una especie de Estado federal inconcluso, renunciamos al derecho a decidir y la autodeterminación”, ha precisado.

El otro mensaje que ha querido trasladar se ha centrado en defender el papel fundamental del PSOE en la transición. “Un verdadero momento refundacional del país” que ahora algunos --en referencia a Podemos-- atacan porque “hay un interés político, no ya contra la transición o la propia Constitución, sino contra los que estuvimos detrás, interesa que la transición se vea mal, igual que todo lo que vino tras el 82”, ya que “es lógico que cuando quieres atacar a alguien lo mejor es desprestigiar su obra más brillante”.

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