La tragedia se cebó en la madrugada de ayer con la familia Catalán, en el barrio de La Marquesa. Sus fuertes convicciones religiosas y su implicación con los problemas de la ciudad -unas horas antes habían participado en un acto solidario con los abuelos de las residencias de ancianos de la zona- no fueron suficiente para esquivar a la muerte. El matrimonio formado por Manuel Catalán, de 60 años, portero prejubilado que hasta el 2010 trabajó en el Colegio Especial Nuestra Señora de La Merced, y su esposa, Manoli Cardoso, de 52 años, falleció por inhalación de humo, al igual que su nuera, Noelia Amador, de 27 años, debido al incendio originado en el porche delantero del número 18 de esta unifamiliar de la calle Afanas hacia las cuatro de la madrugada, según apuntaron desde el Consorcio Provincial de Bomberos.
Los dos hijos de la pareja están ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Jerez pero sus vidas no corren peligro. Jesús Catalán, el hermano mayor, de 27 años, y novio de la chica fallecida, consiguió salir por su propio pie tras abrir las rejas de una ventana de la primera planta, y saltar al techo del patio trasero. El vecino de la casa de al lado le facilitó una escalera para poder llegar a su vivienda. Según relató a sus allegados, se levantó con los gritos de los padres. Dormían todos en la planta de arriba. “Cuando salió de su habitación el fuego le quemaba y no veía nada, pero los padres no paraban de gritar”, comenta un amigo que pudo hablar con él ya en el hospital. Tiene quemaduras pero está “estable”, tal y como indicaron fuentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS).
Su hermana Cristina, de 18 años, y a quien inicialmente por una confusión se dio por fallecida, está “estable dentro de la gravedad” intoxicada por el humo inhalado. Fuentes de la investigación aseguran a este periódico que exceptuando el joven que salió por su propio pie, el resto de los miembros de esta familia s que estaban atrapados en el interior del domicilio se encontraban “en parada cardiorrespiratoria” cuando fueron rescatados por los bomberos. Una vez en el patio, los agentes de la Policía Local y la Nacional les practicaron maniobras de reanimación (RCP), consiguiendo que la joven de 18 años “saliera de la parada los pocos minutos”. Para el resto de su familia fue en vano.
Debido a la envergadura de las consecuencias del incendio, hasta el lugar de los hechos se desplazó la jefa de zona del Consorcio Provincial de Bomberos, María Jesús Palacio, que sitúo los focos del fuego en la zona del porche de acceso a la vivienda, donde había acumulado distintos enseres y mobiliario: desde un sofá, un ciclomotor, un árbol de Navidad a una barbacoa, un pequeño paso y hasta un improvisado altar con dos imágenes religiosas. La de un Cristo que procesiona los Viernes de Dolores -el hijo del matrimonio es presidente de la Asociación Cultural Nuestro Padre Jesús El Pobre, que tenía la sede en esa casa, y la de una virgen. La Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación, y ayer al mediodía los agentes de la Policía Científica acudían al domicilio a tomar huellas. Entre las causas del siniestro se apunta a una vela que presuntamente se habrían dejado encendida junto a la virgen y con las que habría ardido el manto. Tampoco se descarta que se trate de un fallo eléctrico, a consecuencia de la conexión prolongada de un aparato. El patio quedó totalmente calcinado. “Al no tener las llamas sitio por donde salir al exterior -pues el porche estaba techado-, las llamas rompieron los cristales de las ventanas y prendieron parte del salón al quemarse un sofá situado al lado de la ventana (en la planta baja). Si bien en llamas el incendio no fue importante si lo fue el humo que inundó toda la vivienda, y fue lo que provocó las consecuencias que hemos tenido”, concluyó la responsable de zona de Bomberos.
Por su parte, el jefe de la Policía Local, Javier Andrada, también habló de “varios focos” del fuego y relató que fue una unidad de servicio que realiza labores de vigilancia en Estella la que divisó una columna de humo “importante” y alertó al resto de unidades, resaltando el trabajo de los agentes, bomberos y sanitarios.
Una familia muy participativa y querida en Jerez
La tarde antes del suceso, toda la familia asistió al acto “El abuelo feliz” que celebraban las residencias de ancianos de La Marquesa y La Granja dando regalos a los mayores sin familia. “Esta familia es muy conocida en Jerez, porque eran muy activo y muy participativos. El hijo del matrimonio y su novia fallecida eran voluntarios de Protección y su padre era trabajador municipal jubilado. Le ponemos rostro a la mayoría”, lamentó la alcaldesa, Mamen Sánchez.
La casa, sede de la asociación Nuestro Padre Jesús El Pobre
En el porche incendiado se hallaron dos imágenes religiosas. Se da la circunstancia, como podía leerse en una placa en la fachada de la puerta, que el hijo del matrimonio fallecido es el presidente asociación cultural Nuestro Padre Jesús El Pobre, que procesiona el Viernes de Dolores y tenía su sede en la propia vivienda, así como de la federación que aglutina a estas agrupaciones. En La Granja también es muy conocido por su tienda de alimentación.