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Almería

Dos años de cárcel por una agresión con un vaso de cristal tras discutir con camareras de un café

M.A.R. mostró conformidad con la pena interesada por el fiscal, quien, en el acto de juicio, resolvió rebajar la condena de cuatro años de cárcel por un delito de lesiones que interesaba en el escrito de calificación provisional

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La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a dos años de prisión a un hombre que lanzó un vaso de cristal contra un grupo de personas que impactó contra una mujer cuando se encontraban en una cafetería del centro de la capital y tras mantener una discusión con las camareras del local por las consumiciones que había pedido.

   M.A.R. mostró conformidad con la pena interesada por el fiscal, quien, en el acto de juicio, resolvió rebajar la condena de cuatro años de cárcel por un delito de lesiones que interesaba en el escrito de calificación provisional, según han indicado a Europa Press fuentes judiciales.

   El tribunal acordó suspender la pena privativa de libertad a condición de que el acusado pague íntegramente la indemnización de 7.220 euros a la mujer a la que hirió de gravedad cuando el vaso de cristal que lanzó le impactó fuertemente en el rostro.

   Según el relato de hechos, M.A.R. inició a las 19,40 horas del 31 de agosto de 2014 una discusión con las camareras de una cafetería ubicada en la calle de Las Tiendas de la ciudad, al parecer, en relación a las consumiciones que había pedido.

   En ese momento, y tras mostrarse "agresivo" con las personas que se encontraban en el interior del local, procedió a lanzar un vaso de cristal que tenía en la mano contra esas personas, impactando fuertemente en la frente de una mujer.

   La agresión le causó una herida en la cara en forma de 'Y' invertida de cuatro por cuatro centímetros, por lo que precisó asistencia facultativa e intervención quirúrgica para la sutura de la herida. La víctima sufrió, asimismo, un hematoma periorbitario en el ojo izquierdo con inflamación.

   A causa de las lesiones, la mujer tardó en curar 21 días y le quedó como secuela una cicatriz con la misma forma de la herida, lo que le "causa un perjuicio estético importante".

   Tras lanzar el vaso, M.A.R. se marchó del local "no sin antes propinar un puñetazo en el rostro" a otro cliente cuando este trató de evitar que se fuese. Por esta falta de lesiones ha sido condenado al pago de una multa de 40 días con una cuota diaria de seis euros.

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