La décimo tercera sesión de preliminar deparó una función escasa de calidad. Poco o nada que destacar. Sin pena ni gloria fueron pasando una a una.
El coro de Luis Rivero, que abrió la noche, fue sin duda la gran atracción de la función junto al cuarteto de ‘Los niños’. El tango más particular y más inconfundible tuvo en unos egipcios que hicieron las delicias del respetable que calentó una primera parte que se fue diluyendo.
Junto a estos, la sorpresa tuvo en la chirigota sevillana de ‘Yo soy presa’ la sensación de la noche. Desenfada y fresca acabó ovacionada.
En la segunda parte, el cuarteto ‘Este año salimos de milagro’ salvó una función gris y apática.