El médico forense del Instituto de Medicina Legal (IML) de Sevilla que practicó la autopsia al cadáver de la mujer que fue hallada muerta en septiembre de 2014 en una finca agrícola de Coria del Río, hechos por los que la Fiscalía pide 21 años de cárcel para Moisés R.R. por un delito de asesinato, ha confirmado este jueves que la víctima presentaba tres golpes en la cabeza.
Fuentes del caso han informado a Europa Press de que, durante el juicio con jurado popular que se celebra en la Audiencia Provincial, el médico forense ha explicado que el cadáver presentaba un golpe en la frente que no se apreciaba a simple vista y otros dos golpes en la zona posterior del cráneo, los cuales, según ha indicado, serían compatibles con el palo intervenido, que fue hallado a unos 15 metros del cuerpo con restos de sangre y de cabello.
De igual modo, este forense ha indicado que la víctima habría sido atacada desde una posición lateral o posterior, de manera que no estaría de frente al agresor, lo que explicaría que la víctima no presente signos de defensa de ningún tipo en sus brazos.
En la tercera jornada del juicio con jurado, han declarado también varios agentes de la Policía Nacional, entre ellos los que participaron en la inspección ocular y el levantamiento del cadáver en el lugar de los hechos, que han asegurado que hallaron a 15 metros del cuerpo un palo de madera con restos de sangre y de cabello. "Eso es lo que más llama la atención", han dicho, señalando que junto al cuerpo también había unas gafas de sol con una gota "de lo que podría ser sangre".
LA ALFOMBRILLA DEL COCHE DEL ACUSADO ERA NUEVA
Asimismo, los dos agentes que realizaron la inspección ocular en el coche del acusado han indicado que utilizaron luminol como reactivo y lo aplicaron en todo el vehículo, reaccionando en cinco lugares distintos, como son la parte inferior de la puerta del conductor y el asa interna de la parte del piloto, la palanca de cambios, en la puerta del copiloto y en el maletero.
"Nos llamó la atención que la alfombrilla del conductor era nueva", han destacado los agentes.
De igual modo, han comparecido en el juicio los agentes que realizaron la inspección ocular en la vivienda del imputado, donde hallaron unos pantalones vaqueros "con manchas rojizas, al parecer sangre", mientras que el domicilio de la víctima, ubicado justo arriba del inmueble del acusado, presentaba "un gran desorden y mucha suciedad".
En la jornada de este miércoles, el jefe del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional aseguró que tiene "clarísimo" que Moisés R.R., apodado el 'Canario', tenía un "plan preconcebido" para acabar con la vida de la víctima, a la que, según confesó, propinó dos golpes con un palo.
LA VÍCTIMA "NO SABÍA QUE IBA ALLÍ A MORIR"
La víctima "no sabía que iba allí a morir, llegó allí confiada en Moisés, que llevaba un palo y sabía lo que iba a hacer, la llevó engañada", declaró de forma tajante el jefe del Grupo de Homicidios en el juicio con jurado popular que se está celebrando contra el acusado, quien se acogió a su derecho constitucional a no declarar.
En su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público pide para el acusado 20 años de prisión por un delito de asesinato y un año de cárcel por un delito de estafa, así como el pago de una indemnización de 150.000 euros al hijo menor de la fallecida.