La empresa Diseños y Proyectos Técnicos, radicada en Sevilla y dedicada a la ingeniería y la instalación y mantenimiento de proyectos industriales, ha solicitado a la Autoridad Portuaria hispalense una concesión administrativa para utilizar 26.000 metros cuadrados del "ámbito de los antiguos astilleros", para actividades de "diseño industrial, ingeniería, fabricación, ensamblaje y montaje de instalaciones industriales".
En concreto, el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) ha publicado recientemente un anuncio de la Autoridad Portuaria de Sevilla, que da cuenta de que Ditecsa, con sede en Sevilla y filiales en Alemania, Reino Unido, Marruecos, Méjico, Colombia o Ecuador, ha solicitado "una concesión administrativa" para ocupar una superficie de unos 26.000 metros cuadrados "en el ámbito de los antiguos astilleros, en la margen derecha del Canal de Alfonso XIII".
La superficie en cuestión, según el mencionado anuncio, recogido por Europa Press, incluye "cuatro naves y dos edificios de servicios", y la concesión administrativa solicitada se dirige hacia el aprovechamiento de estos espacios para actividades de "diseño industrial, ingeniería, fabricación, ensamblaje y montaje de instalaciones industriales", todo ello tras la "ejecución de nuevas instalaciones para el desarrollo" del proyecto promovido por la empresa.
Con este proyecto, según las fuentes consultadas por Europa Press, Ditecsa desembarca en el Puerto de Sevilla, donde hasta el momento no cuenta con instalaciones, y los antiguos astilleros suman un proyecto más en su carrera hacia la reactivación tras el traumático cierre de 2011.
LOS ASTILLEROS DE SEVILLA. CAÍDA Y RECUPERACIÓN
Como es sabido, el astillero de Sevilla detuvo completamente su actividad el 31 de diciembre 2011 tras una larga agonía financiera y económica. Porque tras su segregación de la antigua sociedad naval 'Izar', extremo que separó al astillero hispalense de la financiación de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), el astillero entró en una lenta deriva hasta su adquisición por parte de los Astilleros de Huelva. No obstante, el funcionamiento de los astilleros bajo la gestión de estos empresarios tampoco prosperó y, finalmente, las instalaciones fueron clausuradas al finalizar 2011 al arrastrar la sociedad gestora una deuda de aproximadamente 193 millones de euros.
Así, el astillero de Sevilla cerraba tras casi 60 años de actividad y haber gozado de volúmenes de producción que, por ejemplo en los años 80, implicaban la contratación de hasta 5.000 personas.
Desde entonces, los astilleros sevillanos han ido recuperando paulatina y lentamente la vida, mediante actuaciones como la reparación del velero alemán Alexander von Humboldt, las operaciones de reparación y mantenimiento de buques de la nueva empresa Astilleros del Guadalquivir o la actividad de la empresa Tecade, dedicada a la fabricación de todo tipo de grandes estructuras especiales y puentes metálicos y recientemente instalada en los antiguos astilleros.
