Parte de la plantilla de Aditel que el martes recibió en plena calle la documentación de sus despidos debido al ERE extintivo que aprobó el juzgado Mercantil 2 de Sevilla ha negado tajantemente que fueran unos “exaltados” y ha asegurado que los tuvieron más de tres horas esperando en los exteriores de las instalaciones sin atenderles. Además, insisten en que el auto judicial determina que el pago debe hacerse de forma automática, tal y como aseguraban desde UGT.
Numerosos trabajadores afectados por el ERE extintivo de Aditel, que incluye a 92 empleados (además de a otro centenar que sufrirá un ERE temporal), han asegurado a Viva Sevilla que la empresa citó a los trabajadores para entregar parte de la documentación a las ocho de la mañana del martes, sin que nadie les atendiera, por lo que se mantuvieron en los exteriores de la compañía “muertos de frío y sin que nadie nos diese ninguna explicación”, comenta una de las empleadas afectadas.
Según su relato, a las once y media de la mañana varios compañeros del medio centenar que esperaba acudieron al interior de las instalaciones para pedir explicaciones, a los que Guillén llama “exaltados”, extremo que rechazan los trabajadores, que recuerdan que no ha habido denuncias, ni se llamó a la Policía.
Fue en ese momento cuando Leopoldo Guillén “salió a la cancela de la empresa con una mesa que llevaba un operario y que tenían ya preparada para que los “exaltados” pudieran recoger parte de la documentación”.
Los diversos testimonios insisten en el trato “inhumano” que les dispensó la empresa, llegando incluso a amenazar a los que grababan la escena, y puntualizan que el día anterior a uno de ellos se le atendió desde la garita de seguridad, donde otro trabajador hizo de testigo en la entrega de la documentación.
Como ya apuntaban los servicios jurídicos de UGT, los trabajadores insisten en que el auto judicial especifica que el pago debe hacerse en la extinción del contrato y todos coinciden en señalar que Guillén “no quiere pagar absolutamente nada”.
Además, rechazan muchos de los argumentos dados por Guillén para justificar su falta de liquidez, entre ellos que Red Eléctrica, uno de sus principales clientes, no pague. “Es el del Gobierno, es imposible que no pague”, asegura uno de los afectados.
Los trabajadores aseguran estar “hartos de que la empresa se siga riendo de nosotros incluso después de habernos despedido” y recuerdan que a pesar de la pésima gestión sufrida, nunca han realizado ninguna huelga.