Según Márquez, estos vecinos “nos han mostrado su preocupación por el trato que de manera discriminatoria se les está dando por parte del alcalde”.
Para el socialista, no sólo no se espera a fijar unos precios por viviendas cuando se produzca la expropiación, sino que a modo de “asusta viejas”, se está “presionando a los más débiles con motivo de la falta de documentación de algunos, para que dejen cuanto antes sus viviendas y por cantidades muy dispares desde 9.000 a 30.000 euros”.
Desde el PSOE manifiestan no entender “que un mismo alcalde, en período electoral, se comprometiese a dar un piso nuevo a los 200 vecinos de la Barriada San Antonio, y que en este caso, se esté presionando a personas mayores para que se vayan de su casa”.
Más de cuarenta vecinos, según expresaba Felipe Márquez, con sus realidades familiares, económicos, de edad, etc., “se encuentran preocupados y desorientados ante lo que se les informa desde el ayuntamiento”. Según Márquez, el PSOE local, al valorar la necesidad de actuar en la zona, una de las más importantes por ser la entrada a Rota por la calle Calvario, “fue reunir a todos los vecinos y ofrecerles una vivienda alternativa mientras fuesen realojados en las nuevas casas que se construyesen”. Según el PSOE de Rota, “mirar por los vecinos no es asustarlos ni tratarlos con distintos raseros, según de qué barriada sean”.
Así, el PSOE pide que se convoque a los vecinos y después se le dé información al respecto, “con ética a la hora de actuar desde el Ayuntamiento”, finalizó Márquez.
