El Ayuntamiento de Ronda establecerá cortes de tráfico en las calles Los Remedios y Santa Cecilia durante este miércoles, jueves y viernes, como consecuencia de los trabajos de reparación de los daños que han provocado las intensas lluvias de este pasado fin de semana en la barriada de Padre Jesús.
Según ha informado el concejal delegado de Tráfico y de Seguridad Ciudadana, Antonio Arenas, estos cortes en la circulación rodada obedecen a la necesidad de reparar la calzada de cantos rodados, que ha quedado seriamente deteriorada en algunas zonas como consecuencia de las lluvias, provocando incluso la aparición de grandes socavones. Además de la interrupción durante estos días de la circulación de vehículos, tampoco podrán acceder a la barriada los autobuses del transporte público urbano.
En este sentido el edil ha destacado la “actuación inmediata, ya que así lo requieren las circunstancias”, al tiempo que ha pedido disculpas a los vecinos de la zona por las molestias. También se verán afectados los rondeños que se desplazan hasta el colegio de La Inmaculada y San José de la Montaña.
Se espera que el acondicionamiento y mejora de la calzada se termine en la jornada del próximo viernes, cuando se abrirá de nuevo el tráfico por estas vías públicas.
NUEVA TROMBA DE AGUA
En la madrugada del sábado al domingo Ronda sufrió los efectos de otra fuerte tormenta, que acumuló en torno a la 01.00 más de 20 litros de agua por metro cuadrado en apenas una hora, registrándose en torno a 40 litros durante la noche.
Como consecuencia de las intensas lluvias, los bomberos tuvieron que intervenir en hasta ocho lugares de la ciudad. Hubo inundaciones en la avenida Martínez Astein, la calle Infante y en el polígono industrial, en la zona junto al cementerio, donde se vieron afectadas algunas naves.
Además, los efectivos tuvieron que rescatar a dos jóvenes de un vehículo accidentado, y liberar la entrada al aparcamiento de la plaza Duquesa de Parcent, que estaba obstaculizada por la caída de una rama.
Asimismo retiraron un coche que flotaba en la avenida Virgen de la Paz, intervinieron en un garaje anegado en la plaza de la Esperanza y reforzaron una farola con peligro de caída en la calle Ricardo Navarrete.
La calle Santa Cecilia se convirtió en un río. El entorno de la plaza de toros volvió a anegarse como ya ocurriera el pasado 28 de septiembre, provocando distintos problemas en algunas de las estancias de la propia plaza, así como en algunos establecimientos comerciales del entorno.
Tras los hechos de septiembre, la alcaldesa de la ciudad realizó unas contestadas declaraciones en las que la regidora afirmó que "ninguna ciudad del mundo estaría preparada para una tromba de agua de estas características", tras asegurar que durante el verano se realizaron los trabajos necesarios para desatascar rejillas y sumideros.