El equipo de gobierno de José Enrique Fernández de Moya tiene previsto contactar esta semana con el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para plantearle la opción "lógica y sensata" de que se establezca "una prórroga del presupuesto" municipal de este año para, "en noviembre", aprobar ya el de 2015 incorporando en el mismo las medidas que proponga el Gobierno central en respuesta a las solicitadas por el Consistorio.
Ha recordado que una vez que el 1 de enero no entra en vigor un nuevo presupuesto, el que hay "automáticamente sufre una prórroga", que es lo que ha sucedido este año, a la espera de la aprobación de unas cuentas municipales para el presente ejercicio.
En relación a ese presupuesto de 2014, el alcalde ha señalado que, con los plazos que maneja, éste podría estar vigente "únicamente durante tres meses", ya que si se pudiera elaborar "a finales de este mes" de julio, su entrada en vigor no se produciría "hasta en torno a la primera quincena de octubre, entre su publicación y los plazos para la resolución de alegaciones y su aprobación definitiva".
Para Fernández de Moya, "no tiene sentido aprobar un presupuesto que esté exclusivamente vigente durante tres meses" --octubre, noviembre y diciembre--, para, además, verse obligado a elaborar uno nuevo "entre noviembre y diciembre", de ahí que considere que lo "más lógico" es trabajar ya directamente en la elaboración de las cuentas de 2015, para que éstas entraran en vigor "el 1 de enero".
El alcalde ha insistido en recalcar que todo ello viene "motivado por las circunstancias excepcionales" del plan de pago a proveedores puesto en marcha por el Gobierno central y al que el Ayuntamiento se ha acogido para pagar "253 millones de euros" de deudas --que ha obligado a poner en marcha "planes de ajuste y austeridad"--, y a las medidas extraordinarias últimas ofertadas por el Ministerio de Hacienda a las que el Pleno del 13 de junio aprobó adherirse.
