La enfermería sevillistas comienza a dar salida a un importante grupo de lesionados, para alegría de Emery. Carriço, llamado a la titularidad en la zaga sevillista, ya se entrena con total normalidad. Vitolo ha comenzado a tocar balón y el lunes se unirá al grupo. Y por su parte, Gameiro podría estar en Pucela siempre y cuando se integre con normalidad junto al resto de sus compañeros a mediados de la próxima semana.
Pero el mayor alegrón para el técnico vasco viene determinado por la vuelta de José Antonio Reyes. El utrerano ha superado sus dolencias de la pretemporada y está listo para convertirse en una de las piezas claves de Emery. El míster pretende darle la banda derecha y cuanto antes mejor. Considera que Reyes debe ofrecer su máximo nivel y confía mucho en él.
Pareja: “Regresé antes de lo prevista”
El argentino pasó ayer por sala de prensa, donde indició que su vuelta “fue precipitada”. “Todavía me duele algo el hombro, pero la ilusión por jugar lo supera todo”, señaló.