La Policía Local de Astorga (León) encontró a última hora de la tarde de este viernes los cadáveres de dos mujeres que llevaban muertas varios días en una vivienda de la localidad leonesa de Astorga, según ha informado el periódico 'Diario de León'.
Las fallecidas eran madre e hija, de 82 y 40 años respectivamente, que llevaban muertas varios días. La investigación ha determinado que la madre, M.P.F, falleció por causas naturales y, posteriormente, su hija, que sufría deficiencias físicas y psíquicas de importancia, falleció al carecer de los cuidados que precisaba.
Según han relatado los informantes, entre las 19.00 y las 20.00 horas varios vehículos policiales llegaron al número 15 de la calle de San Juan alertados por los vecinos del inmueble, "que habían detectado un mal olor en la escalera del edificio". Los testimonios recogidos apuntan a que los agentes de la Policía Local, ayudados de una escalera, consiguieron ver por las ventanas de la vivienda --un primer piso--, el cuerpo de una de las difuntas, que podría llevar al menos cuatro días muerta.
Las mismas fuentes, sin embargo, no han podido precisar el tiempo que transcurrió entre los dos decesos (uno anterior al otro) y el hallazgo.
Una joven que conocía a las difuntas ha indicado en este sentido que la Policía ya buscaba a las mujeres desde hacía días. "Tenían un piso en Madrid al que solían viajar, y ya el domingo hubo gente tocando el timbre para ver si abrían", explicó la chica.
La testigo de la actuación policial añadió también que sobre las 23.00 horas se sacaron los cuerpos de la vivienda para proceder a su traslado al Instituto de Medicina Legal de Ponferrada, donde ya se ha practicado la autopsias.
BUSCADAS SIN ÉXITO DURANTE VARIOS DÍAS
La fallecidas vivían solas en un piso de la calle de San Juan, en Astorga. El marido y padre de la familia falleció hace años y el matrimonio no había tenido más hijos.
Los intentos de la Policía Local para localizar a ambas mujeres se debían a un requisitoria de uno de los jugados de Astorga a consecuencia del proceso iniciado sobre la capacidad de la madre, dada su avanzada edad, de cuidar de la inválida, que sufría una importante afección psíquica y, entre otras dolencias, era invidente.
"El hecho de que dispusieran de una vivienda en Madrid dificultó la búsqueda", han explicado fuentes de la investigación tras explicar que ya se ha descartado la intervención de terceras personas en las muertes por la falta de indicios de violencia en los cuerpos. "Tampoco se baraja la posibilidad del suicidio o que se tratara de un accidente en el hogar, como un escape de gas", han detallado.
CONSTERNACIÓN VECINAL
Los vecinos de Rectivía comentaban este sábado que se encontraban "consternados" al conocer el suceso a la puerta de la parroquia del barrio, donde figuraba la esquela. "Si bien era normal que madre e hija pasaran temporadas fuera de Astorga, sí que se les conocía en el barrio, en especial a la primera, ya que la discapacitada raramente abandonaba su domicilio", aseguraban.
Como ya ha sucedido en casos similares que se han hecho públicos, las circunstancias de las finadas motivaron que una muerte causara la segunda y que discurrieran los días sin que nadie se percatara de lo que había ocurrido en la vivienda.
La Policía Local de Astorga ya ha remitido las diligencias policiales instruidas por el caso al Juzgado de Guardia de Astorga.
