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San Fernando

"No podemos utilizar los problemas para pegarnos con las banderas unos a otros echándonos las culpas"

Fernando López Gil cree que en el PSOE de San Fernando se ha instaurado la política del trabajo en vez de la del poder y no espera problemas en la calle Arenal. Cree que los políticos están para solucinar los problemas, no para crearlos.

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Hay dos cosas enlas que cree a pie juntillas el nuevo delegado del Gobierno andaluz en Cádiz. Una es el diálogo que va a intentar llevar a la práctica con todas las administraciones para sacar adelante los proyectos pendientes en la provincia; la otra es la política, la capacidad del hombre para cambiar las cosas a pesar de los malos tiempos que corren para los políticos. Pero piensa que el que no cree en la política se echa tierra sobre su propio tejado si en vez de estar en el sillón de su casa lamentándose no se levanta, sale a la calle e intenta cambiar el mundo. Sobre todo ante los recortes en todos los derechos ciudadnos que se estan acometiendo en estos años. Y los que quedan.

—Desde el año 2002 en que ofreció su primera rueda de prensa hasta la despedida de este martes, pasando por el triunfo electoral de 2007 y los nueve concejales socialistas en el Ayuntamiento a pesar del tsunami azul que recorrió España. ¿Cómo se siente?
—Con unos recuerdos maravillosos. Ha sido un tiempo muy duro en San Fernando, he dedicado todas las horas posibles a este reto porque entendía que era mi obligación y quería tener la conciencia tranquila que el día que lo dejara lo había dado todo y creo que lo he hecho. Hemos conseguido unos resultados muy buenos, no sólo los de 2007 que tuvieron mucho valor. Los de 2011, aunque no conseguimos ser la fuerza más votada, pueden tener más valor que los de 2007 porque mientras en toda España el PSOE bajaba, aquí subimos tres mil votos en el momento de peor valoración del PSOE por la crisis. Eso decía que la lista que presentábamos gustaba. Perdimos por 300 votos ante el PP pero fuimos el PSOE de España que más subió. Creo que eso ha servido para que me nombren delegado del Gobierno, pero además de eso creo que ha sido por una forma de entender la política.


—Ahí quería llegar. Cuando los partidos están gobernando no hay resonancia fuera de ellos pero es que en el PSOE, sin gobernar, no ha habido jaleo. Algo tenía que haber por dentro, quizá el hecho de que usted siempre ha llevado el diálogo por bandera y supongo que los demás compañeros de la ejecutiva también lo llevaban. Ustedes se limitaban a presentar ideas novedosas que luego no se llevaban a la práctica porque no gobernaban pero no sacaban los trapos sucios.
—Creo que el tándem Jaime Armario y Fernando López Gil hicimos eso perfectamente. Jaime es una persona con una capacidad enorme para saber distraer cualquier confrontación que parece que no ocurre y se disuelve sin que parezca que ha ocurrido y tiene esa habilidad para hacer que la gente se entienda sin que exista la confrontación. Y mi obligación era llevar el ritmo del trabajo, al estar en el Ayuntamiento, con lo cual él era el encargado de llevar un partido que apoyaba ese trabajo institucional en el Ayuntamiento y el equilibrio era un resultado que ha conseguido que mucha gente se sumara a ese proyecto. Gente nueva que entendía esa nueva forma de hacer política.


—La siguiente pregunta me la da usted hecha. Jaime Armario y Fernando López Gil son capaces de poner en marcha una nueva forma de hacer política pero al día de hoy, los dos están ya fuera de la dirección del PSOE de San Fernando, de la primera fila. ¿Qué puede pasar a partir de ahora? ¿Ha quedado suficientemente asentado esa forma de hacer política para que a partir de ahora no trasciendan las cuchilladas internas?
—Por una parte, Jaime va a seguir siendo una de las grandes voces del PSOE local porque va a seguir aquí y es verdad que yo no estaré durante un tiempo en la primera línea del partido ni de la función municipal, pero sí estaré volcado en cada tema que desde la Junta de Andalucía sea de interés para San Fernando. Pero lo importante es que lo que hemos conseguido instaurar una cultura del trabajo. La cultura del poder es la que provoca la confrontación, pero cuando implantas una cultura del trabajo, planteas un objetivo, un proyecto… haces que la gente no tenga tiempo de pelear porque está en el trabajo. Los compañeros que están actualmente con Jaime y conmigo, Araceli, Patricia… tienen esa cultura del trabajo y estoy seguro de que pronto el PSOE llegará al gobierno, gobierne la ciudad y transforme San Fernando que lo necesita, y mucho.


—Habrá que formar un nuevo líder. ¿O usted piensa volver, si lo dejan, a presentarse a la Alcaldía de San Fernando? Lo digo porque formar un nuevo líder cuesta mucho y mucho más uno que gane las elecciones.
—El candidato o candidata se verá en su momento. Yo seré candidato siempre que mi partido me lo pida porque San Fernando es para mí el reto más importante, más que cualquier otro…


—O se lo puede pedir usted a su partido.
—Yo estoy a disposición de lo que el partido quiera. Lo hice en el 2007 y en el 2011 y cuando el partido decida, si lo hace alguna vez volver a contar conmigo, estaré dispuesto. Pero también es posible que elijamos a otra persona porque en esta agrupación hay un capital humano que cualquiera de los nombres que he manifestado puede ser un magnífico candidato o candidata para el futuro de San Fernando y lo harían muy bien. De ahí saldrá un nuevo líder, que en su momento será candidato o no lo será, pero que esté a la altura de lo que es ahora el partido, no porque yo fuera la voz, sino porque hay una serie de gente que trabajaba para que yo pudiera parecer mucho mejor de lo que soy.


—Usted ha dicho que le da pena las cosas que no se han hecho en San Fernando. Me supongo que se referirá a las que llevaba usted en sus programas, porque si miramos las hemerotecas de lo que llevamos de siglo e incluso más atrás, en San Fernando no se ha hecho nada. Estamos con los mismos problemas enquistados. Es verdad que la ciudad tiene más aspecto de ciudad pero ha sido como hacer la casa pero no meter los muebles. Lo que quiero decirle es que los ciudadanos lo mismo no tienen mucho que agradecerles a los políticos de San Fernando, y no me refiero sólo a usted que no lo ha podido hacer porque no ha gobernado.
—La verdad es que San Fernando, comparándola con el resto de la provincia –que está mal y Andalucía también está mal-, cualquiera de las cosas que hay en el entorno de la bahía que crean empleo no existen en San Fernando. No existe un desarrollo turístico como existe en Chiclana, en El Puerto, en Conil o en Cádiz; no hay un desarrollo industrial parecido al menos al que tiene Cádiz o El Puerto o Chiclana y no hay un desarrollo del comercio del centro como lo hay en el resto de las localidades del entorno. Eso hace que San Fernando sea una ciudad con un modelo permanentemente equivocado. Y es verdad que es una ciudad con problemas, pero no ha aprovechado ninguna de las oportunidades que ha tenido. Mientras los demás han sabido crear espacios para el turismo mirando el mar, nosotros hemos empezado a mirar al mar hace dos días…


—Y de reojo.
—Y de reojo. O con intentos de apantallarlo para que no lo viéramos. Otras veces, cuando tenemos una historia para sacarle rédito turístico, como Camarón o Las Cortes, tampoco hemos sacado provecho. De Camarón acaba de pasar el vigésimo aniversario de su muerte y no hemos estado a la altura. Lo mismo ocurre con Las Cortes. Hemos hecho una buena celebración del Bicentenario…


—Teniendo en cuenta las circunstancias.
—…pero hemos hecho inversiones equivocadas. Por ejemplo el Centro de Recepción de Visitantes no es una opción turísticamente atractiva, o no se ha convertido en tal… Hemos perdido oportunidades, porque ha habido muchas inversiones en este tiempo y por desgracia se han perdido en carriles bici mal terminados, en Museo de la Historia y del Mar que no se termina de ejecutar, en escenario que se construyen en parques como el Almirante Laulhé que no funciona… Ha sido todo como consecuencia de no tener un modelo de ciudad. Y cuando hablábamos de nuestro programa electoral y la gente me decía que era irrealizable, yo les decía que se dieran una vuelta por la bahía de Cádiz, no por Francia o por Alemania, sino por la bahía, y comprobarán cómo cualquiera de las cosas que estaban en ese programa estaban en el resto de las poblaciones de la bahía de Cádiz. Por eso San Fernando tiene un gran déficit, pero tiene un gran potencial y estoy convencido que saldrá de ésta, llegará alguien que tenga claro el modelo y que sea peleón y duro con las administraciones y llevará a buen término a esta ciudad en los próximos años. Hay que confiar en la política porque es la única forma de que las cosas cambien.


—Difícil lo veo. Un pregunta que me gustaría que me contestara quitándose la chaqueta de político. ¿Por qué no se ha desafectado los terrenos militares de Camposoto, quitando las malas relaciones que haya habido? ¿Cuando los militares dicen no, los políticos no pueden hacer nada? Cuando dicen no con todas las razones.
—Con una justificación. Creo que no hay un motivo único que podamos decir. En cada momento ha existido un motivo diferente. Cuando gobernaba el Partido Andalucista con el Partido Popular en el Gobierno era uno, cuando ha gobernado el PSOE en Madrid y aquí el PA con el PP era otro… Pero hay un motivo común, y es que no ha existido un gobierno local con la fuerza suficiente para decirle a Madrid, gobernara quien gobernara, que esos terrenos eran estratégicos para la ciudad y que no iban a permitir…


—Decir lo han dicho todos, pero no les han hecho caso a ninguno.
—Cuando un gobierno ejerce la fuerza ciudadana tiene la capacidad de convencer. Por una parte con un proyecto económico que haga que aquello sea atractivo para Defensa y con una fuerza ciudadana que le obligue. Camposoto se ha utilizado políticamente por todos de una manera injusta y muchas veces por el gobierno (local) al que le ha interesado el discurso de no nos lo dan y los que gobiernan en Madrid son muy malos. Y si ha sido posible esa desafectación en toda España y en toda Andalucía, es imposible que con los mismos gobiernos en Madrid del PP y del PSOE, aquí no se haya dado porque se han dado muchos otros motivos. Pero con un gobierno fuerte en la ciudad, con un proyecto claro, eso hoy sería un desarrollo turístico. Porque no es un espacio que sea imprescindible, digan lo que digan, para la defensa nacional.


—Al menos no todo. Y me refiero sólo a los terrenos de Camposoto. No entro en San Carlos que por mucho que se quiera tiene muy escasa accesibilidad.
—Y además que sigan siendo un potencial de empleo para la ciudad, que sigan ahí y que sigan cada día con más gente. Pero Camposoto podría generar mucho más empleo con otro proyecto, pero por desgracia no lo ha habido.


—El problema posiblemente haya sido la falta de diálogo fluido entre las administraciones, precisamente lo contrario de lo que usted dice que quiere conseguir desde su nuevo cargo como delegado del Gobierno de Andalucía en Cádiz. ¿Se puede conseguir un diálogo fluido con administraciones del PP, del PSOE y de IU gobernando a la vez?
—Lo voy a intentar. Es mi reto. Si no lo consigo puede que fracase total o parcialmente, pero lo voy a intentar. Mire, no es posible que en esta provincia tengamos problemas históricos como el de Las Aletas o cualquier de los muchos que se pueden poner encima de la mesa, y que los partidos políticos los utilicemos para pegarnos con la bandera unos a otros echándonos la culpa y que cada vez que venga el dato del paro, el ciudadano que está en su casa no entienda qué estamos haciendo. Entiendo que cada uno tenga un discurso, una discrepancia, una opinión en cada uno de los temas, pero desde las instituciones y no desde los partidos políticos, tenemos que marcar una hoja de ruta conjunta, esto va a pasar por aquí, por aquí y por aquí y lo solucionamos. Si no somos capaces de marcar esa hoja de ruta en esos grandes temas, la política carecería de sentido.

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