El importe de los trabajos asciende a 137.507 euros, siendo “el 50% con cargo a una subvención de la Diputación”, y contará con un plazo de ejecución de cinco meses. En principio, las obras también se extenderán a calles anexas Murillo, Santa María y Bilbao.
Con el proyecto se pretende “hacer una nueva ordenación de ese espacio, que ocupa una superficie de 1.040 metros, dotándolo de un acerado de anchura uniforme que cumpla la normativa vigente respecto a la supresión de barreras arquitectónicas”.
Igualmente se prevé “la pavimentación de la calzada y aceras así como la renovación de la red de saneamiento, recogida de pluviales, agua potable, alumbrado público y mobiliario urbano”.
En la actualidad, el pavimento se encuentra “en muy malas condiciones, con deformaciones y falta de piezas, y con una banda de aparcamiento que estrangula la acera e impide que cumpla la normativa para la supresión de barreras que establece un ancho mínimo de 1,20 metros”.
El edil delegado de Vías y Obras, Gabriel Orihuela, manifestó que este proyecto persigue mejorar el flujo peatonal entre la plaza del mercado Ingeniero Torroja y la Plaza Alta.