El Casino Cultural ‘Círculo de la Unión’ continúa con su ciclo ‘Vivencias’, que en su último encuentro contó con la participación de dos símbolos de la lucha LGTBIQ: Manolita Chen y Fede Benítez. La primera narró sus experiencias como primera madre trans de toda España, lo cual le supuso romper con las reglas sociales de la época. Además, adoptó a niños con discapacidad intelectual. Fue el primer hombre que ha rezado como mujer en su DNI y, ahora, trabaja en la casa que ha fundado en la ciudad para recibir a personas homosexuales, lesbianas, transexuales, etc. que tienen problemas de relación con sus familias. De la mano del presentador y conductor del acto, Antonio Barea, se a Manolita Chen a rescatar la historia de su juventud, cuando tuvo que abandonar Arcos “porque me maltrataban”, explicó en alusión a los trabajos que le obligaba a hacer el Ayuntamiento “para quitarla del medio”. Entonces la enviaban al cementerio a realizar labores de pintura. Manolita decidió marchar a Cataluña, donde descubrió una sociedad mucho más avanzada y que asumía con normalidad la condición LGTBIQ. “En Arcos no ha había día en que no me dieran una paliza y me dijeran maricón”, explicó Manolita Chen ante el público.
Pero el tiempo ha pasado y esta activista del movimiento es una mujer orgullosa de su condición y que se ha convertido en un emblema de la lucha LGTBIQ en toda Andalucía y en el resto de España. De hecho, la llaman desde todos sitios para representar al movimiento y ha sido reconocida en este sentido en decenas de ocasiones por instituciones, asociaciones y colectivos de todo tipo.
Por su parte, Fede Benítez, que estudia segundo de la ESO, es una joven que lucha por los mismos objetivos, para que la sociedad comprenda y respete a las personas trans.
El público tuvo ocasión de realizar preguntas a las personas invitadas al acto e incluso de debatir sobre la condición LGTBIQ. Como conclusión del acto, “todavía queda mucho camino por recorrer” para que la sociedad normalice a estas personas y las considere como al resto de las personas. También intervino el vicepresidente de la Asociación LGTBIQ Delta Sierra de Cádiz, Joaquín Gómez, quien igualmente dejó constancia de cómo estas personas han sido maltratadas en la historia, vejadas y agredidas. Por ello, los presentes reivindicaron igualdad y respeto.
Para finalizar el acto, Manolita Chen agradeció la intervención de Delta y destacó el papel de la Fundación que lleva su nombre que promueve esos valores de respeto. “No son revanchas, sino que todavía hay discriminación”, dijo en alusión a la ausencia en el acto de unos medios de comunicación que se requieren en todos sitios y a la misma hora.